¿Cuáles son las causas de esterilidad más frecuentes?

Girofiv

Tanto la esterilidad como la infertilidad son producidas por distintos factores, que pueden afectar a la mujer (causa femenina), al hombre (causa masculina), o bien a ambos miembros de la pareja (causa mixta).

En un determinado porcentaje de los casos, el factor de esterilidad no se llega a diagnosticar (esterilidad sin diagnóstico o de causa desconocida).

 

CAUSAS DE ESTERILIDAD

FEMENINA
MASCULINA
DE ORIGEN MIXTO
DE ORIGEN DESCONOCIDO
Edad de la paciente
Alteraciones del ciclo menstrual
Fallo ovárico prematuro
Ovario poliquístico
Endometriosis
Obstrucción tubárica
Malformaciones uterinas
Genéticas
Fallos repetidos de fecundación en tratamientos de FIV
Abortos de repetición

La edad condiciona en gran parte la fertilidad de la mujer.
En el momento de nacer, la mujer dispone de la dotación máxima de óvulos (ovocitos) en los ovarios. El número de estos ovocitos va disminuyendo a lo largo de la vida, de forma que, alrededor de los 50 años, el 80% de las mujeres ya han agotado su reserva ovárica, llegando la menopausia.

La fertilidad de la mujer se mantiene estable hasta los 35 años mientras que, a partir de los 38 años, disminuye considerablemente, al mismo tiempo que también se reduce la calidad de los ovocitos (incrementa la frecuencia y la cantidad de anomalías cromosómicas que, en el caso de ser fecundados, dan lugar a embriones con baja capacidad de implantación y/o elevada tasa de aborto).
La valoración de la reserva ovárica de la mujer ofrece una información muy importante a la hora de indicar cuál es el tratamiento más oportuno.

El ciclo ovárico tiene una función primordial para conseguir el embarazo.
Durante el ciclo ovárico se produce la ovulación y la preparación del endometrio para hacerlo receptivo a los embriones. El ciclo dura unos 28 días (entre 25 y 30 días en la mayor parte de las mujeres), mientes que la ovulación tiene lugar a la mitad del ciclo: el día 14 aproximadamente.

Irregularidades del ciclo menstrual:

Polimenorrea: ciclos menstruales de menos de 21 días.

Oligomenorrea: ciclos menstruales de más de 35 días hasta 6 meses

Amenorrea primaria: nunca se ha tenido la menstruación.

Amenorrea secundaria: no se tiene la menstruación en un período de mínimo 6 meses. Puede ser debido al síndrome de ovario poliquístico, alteraciones alimentarias (anorexia y bulimia), practica de deportes de élite, hiperprolactinemia, o por alteraciones genéticas.

Anovulación: no se libera el ovocito hacia las trompas, ya sea porque no se ha formado o porqué no ha llegado a la madurez necesaria. Este trastorno puede ser causado por alteraciones en los niveles de las hormonas ováricas (estradiol, progesterona), del sistema hipotálamo-hipofisario (GnRH, FSH, LH, prolactina, etc) o de tiroides (TSH).
La anovulación se da en un 25% de los casos y es una de las causas con mejor pronóstico una vez se ha establecido el diagnóstico y el tratamiento.

Conocido también como insuficiencia ovárica precoz, se caracteriza por el paro de la actividad del ovario de forma prematura, antes de los 40 años. Afecta aproximadamente al 1-4% de las mujeres en edad fértil.
Las causas que lo producen pueden ser genéticas (como es el caso del síndrome de Turner o X-frágil), hereditarias, alteraciones enzimáticas, enfermedades autoinmunes, o después de haber recibido tratamientos de quimioterapia o radioterapia.

El síndrome del ovario poliquístico (SOP) es la causa más frecuente de alteraciones del ciclo menstrual en la mujer. Se da en un 4-7% de las mujeres en edad reproductiva. Se caracteriza por la presencia de dos o más de los siguientes criterios:

  • Ciclos irregulares asociados con problemas de ovulación.
  • Morfología ovárica con presencia de numerosos folículos y frecuentemente con una alteración de los niveles de las hormonas FSH y LH.
  • Exceso de la actividad androgénica.
  • Anomalías del metabolismo de la glucosa y la insulina.


Esta patología engloba una amplia gamma de manifestaciones: desde las mujeres con menstruaciones regulares y apariencia física normal hasta casos más severos, con ausencia de menstruación, hirsutismo, acné y obesidad.

Enfermedad benigna que afecta a muchas pacientes en edad reproductiva. Consiste en la aparición y el crecimiento de tejido endometrial (capa que recubre el interior del útero) fuera de la cavidad uterina. Lo más frecuente es que aparezca en la cavidad pelviana (ovarios, trompas, detrás del útero, intestinos, o en la vejiga urinaria) y, en menor frecuencia, fuera del abdomen.
Aunque sus causas no son del todo conocidas, la endometriosis se asocia a una causa de esterilidad en un 20% de los casos.

Se produce cuando las trompas de Falopio, los conductos encargados de llevar los espermatozoides hacia el óvulo y hacerlo llegar al útero una vez fecundado, presentan algún tipo de lesión, ya sea un bloqueo o una adherencia que impide su buen funcionamiento. Este hecho conlleva una disminución o la incapacidad total de la gestación.
Las causas principales que dan lugar a una obstrucción tubárica son las de origen infeccioso causadas por gérmenes como la gonorrea o la clamidia, hidrosalpinx (acumulación de líquido al interior de las trompas), o por efectos de la endometriosis.
El factor tubárico es la causa del 25% de los casos de esterilidad femenina.

Patología congénita que afecta un 5% de la población general. Es producida básicamente por un desarrollo anormal de los conductos Mullerianos durante el proceso embrionario, aunque también se puede asociar a otras malformaciones genitales, urológicas o rectales.
Hay distintas malformaciones uterinas, aunque las más frecuentes son la del útero septado y el útero bicorne.
La presencia de miomas o pólipos y la presencia de adherencias intrauterinas también pueden afectar a la receptividad endometrial de los embriones.

Alteraciones genéticas del cromosoma X, como son deleciones o translocaciones del cromosoma X, o cariotipo anormal, como es el caso del síndrome de Turner (XO).

Son los casos en que se han practicado distintos tratamientos de fecundación in vitro (FIV) sin éxito. Las causas más frecuentes son la falta de estimulación ovárica, fallo de fecundación, o falta de implantación embrionaria, entre otros.

Se considera una paciente con abortos de repetición cuando ha sufrido dos o más veces la pérdida prematura y espontánea del embarazo durante el primer trimestre.

ALTERACIONES DEL SEMEN
ANEYACULACIÓN O ASPERMIA
VARICOCELE
CRIPTORQUIDIA
IMPOTENCIA
ENFERMEDADES DE TRANSMISIÓN SEXUAL
GENÉTICAS

Oligozoospermia: disminución de la concentración de espermatozoides en el semen. Suele ser provocada por una escasa producción de espermatozoides en los testículos, aunque a veces también puede ser producida por una obstrucción parcial de los conductos deferentes.
Astenozoospermia: disminución de la movilidad progresiva de los espermatozoides. El origen puede ser testicular, del epidídimo, o por la acción de componentes químicos, infecciosos o inmunológicos.
Teratozoospermia: bajo porcentaje de espermatozoides con una morfología normal. Su origen es mayoritariamente testicular o genético.

Es frecuente que estas alteraciones se presenten asociadas. La oligoastenoteratozoospermia es el diagnóstico más frecuente en el hombre estéril.
Azoospermia: se trata del caso más extremo y se caracteriza por la ausencia de espermatozoides en el eyaculado. Las causas pueden ser alteraciones de los niveles hormonales (principalmente de la hormona FSH), traumatismos, infecciones, o genéticas, como es el caso del síndrome de Klinefelter. Se puede diferenciar entre:

  • Azoospermia secretora: el testículo no produce espermatozoides.
  • Azoospermia obstructiva: el testículo produce espermatozoides pero existe algún problema en los conductos deferentes o en el epidídimo que impiden su transporte hacia la uretra.

Se define como la ausencia de eyaculación. Un caso particular son los pacientes que presentan una eyaculación retrógrada, es decir, que la eyaculación se produce hacia la vejiga urinaria en lugar de hacia el exterior a través de la uretra.

Son dilataciones venosas en los testículos. Puede influir en la esterilidad, ya que disminuye la movilidad de los espermatozoides e incrementa la fragmentación del DNA espermático.
El varicocele es habitual en un 15-20% de los hombres y en un 40% de los hombres infértiles.

Ausencia de testículo en la bolsa escrotal. Es causado por un mal desarrollo del aparato genital durante la formación fetal. Tiene una incidencia de un 3% en los recién nacidos y de un 30% en los prematuros. En este caso, hay un riesgo más elevado de presentar anomalías genéticas que afectan a los espermatozoides.

La dificultad para mantener relaciones conlleva una disminución de la capacidad reproductiva. La impotencia o cualquier otra incapacidad de este tipo tienen hoy tratamientos eficaces que mejoran la calidad de vida. En estos casos, se recomienda la consulta a un andrólogo.

Las infecciones del aparato reproductor masculino pueden producir alteraciones transitorias de la calidad del semen, ya que la acción de ciertas bacterias patógenas puede bloquear el transporte de los espermatozoides desde los testículos.

Alteraciones genéticas del cromosoma Y, como las microdeleciones del cromosoma Y, o cariotipo anormal, como es el caso del síndrome de Klinefelter (47XXY).

CAUSAS ESTERILIDAD DE ORIGEN MIXTO

Existe un problema de esterilidad en ambos miembros de la pareja. Se produce en un 20% de las parejas estériles.

CAUSAS ESTERILIDAD DE ORIGEN DESCONOCIDO

El término “esterilidad de origen desconocido” se establece en aquellos casos en los que, después de realizar un estudio completo a la pareja, no se ha podido diagnosticar ninguna causa aparente responsable de la esterilidad.
Aproximadamente entre un 10 y 15% de las parejas estériles están dentro de este grupo.

Hay otros factores implicados en la disminución de la fertilidad como:

  • Factores ambientales y profesionales, como son la exposición continua a sustancias químicas o tóxicas (plomo, óxido de etileno, pesticidas…), o determinados tratamientos médicos, como las radiaciones X y los tratamientos del cáncer.
  • Factores relacionados con los hábitos cotidianos: la dieta, el ejercicio y el consumo de tabaco, alcohol u otras drogas.